jueves, 16 de octubre de 2008

Noche de reflexiones y discrepancias en la Biblioteca Nacional


Controversia. Una simple palabra que dice mucho. Personas con diferentes puntos de vista que tal vez por su apasionamiento les es difícil ceder ante los demás. Un buen nombre para lo que sucedió el día miércoles en la Biblioteca Nacional del Perú.

La Biblioteca Nacional (BNP) desde hace varios meses viene organizando conferencias, presentaciones de libros, y muestras de películas y documentales. Este mes el ciclo de reflexiones en este recinto se llama Controversias y el tema del día miércoles 15 fue: "Velasco: 40 años después".

Eran las siete de la noche, la velada se veía prometedora. Cabezas calvas, otras canosas y algunos jóvenes se podían presenciar. Todos impacientes por escuchar los comentarios de los panelistas presentes. Diez minutos después de la hora pactada empezó la "Controversia".

En la mesa se encontraban los ponentes Juan José Garrido Koechlin, Héctor Béjar y Paul Laurent quien cumplía la función de moderador. El primero es economista y además de fundador es presidente ejecutivo del Instituto Acción; y el segundo se desempeña como político social e investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo y la Participación (CEDEP).

El ambiente era especial. El nuevo local de la Biblioteca Nacional es en sí especial. Una moderna infraestructura y nuevos servicios hacen de esta una de las bibliotecas mejor equipadas. Aún está dando sus primeros pasos pero tiene buenas iniciativas. Esa noche en el teatro-auditorio Mario Vargas Llosa se respiraba las ganas de debatir.

Los expositores tenía posiciones totalmente diferentes. Cuando uno hablaba la cara del otro se llenaba de gestos y muecas imposibles de ocultar. Para algunos esa fue una de las partes más entretenidas. Todos escuchaban tan atentos que cuando sonaba un inoportuno celular, todos le dirigían fulminantes miradas a esa indeseada persona.

Las cosas más interesantes que mencionó Juan José Garrido fue que nuestro PBI sería 65% mayor si no hubiera ocurrido el golpe de estado de 1968 por Juan Velasco; que la agricultura, desde ese momento, dejaba poco a poco de ser importante; y que no nacionalizó sino, expropió o en otras palabras para el economista, robó.

Por el contrario Béjar se mostraba a favor de las acciones de Velasco, lo defendía aunque nunca lo hizo explícito. Según este ponente los resultados de la deuda que tanto criticó Garrido Koechlin se podía ver en la infraestructura. "Velasco nos hizo una de las potencias militares del Pacífico por la compra de armas", enfatizó Béjar al mencionar las cosas -según él- buenas de su gobierno.

La noche ya llegaba a su fin, y con la rueda de preguntas se cerró la controversia. La mayoría de las personas que formularon sus interrogantes -que en realidad no eran preguntas- hacían apología de Velasco. Exaltados opinaban y criticaban la ponencia del economista Garrido quien con su terno negro y su macbook de igual color se retiró sin sentir el apoyo del público.

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